Hay una Navidad que ni siquiera tiene
nombre, donde no hay Santas ni Reyes Magos, donde no hay cena de Nochebuena
porque la noche en realidad..no es buena. Es esa que viven los que no tienen
panetones, ni turrón, donde no hay pavo o pernil, donde los únicos panes que
consumen están hecho del barro que pisan y es que por faltar, ni siquiera
tienen agua para beber…pero aún así, las personas seguimos celebrando el rito
mas comercial del año, mucho mas comercial que el día de la madre… La publicidad nos ha
creado el supuesto de tener que regalarnos los unos a los otros y comprarle a
los niños todo lo que los fabricantes nos quieren vender y que nosotros debemos
comprar…es como una especie de hipnosis colectiva donde crean un estado de fantasía
tal que se cree que el mundo será mejor mientras mas regalos hagamos o
recibamos..un estado que no nos permite ver más allá de lo que la publicidad
indica que veamos y nos aleja de la realidad sobre lo que es el verdadero espíritu de la navidad…los trabajadores se ciegan por el dinero que reciben fruto de un
año de trabajo y aunque los 365 días del siguiente año se la pasen “mordiendo
un cable”, prefieren gastar todo en una sola noche…ropa nueva, zapatos, comida
en abundancia y muchos excesos, así de esta manera, celebran con
alegría la llegada del niño Jesús…
Pero de verdad alguno piensa en Jesús cuando
llega la Navidad? Y que sucede con los niños de los mas de 200 millones de
persones que se encuentran actualmente sin empleo? No se supone que la Navidad
es para celebrar en familia la llegada del hijo de Dios quien nos inculcó un mensaje de amor hacia los niños?...adonde esta ahora el amor si en el mundo, mas de
400 millones de niños entre 5 y 17 años (según datos de la Organización
Internacional del Trabajo,
OIT) trabajan a diario produciendo café, té o chocolate para que otros se
sienten a la mesa en navidad a consumirla sin pensar como se produce lo que beben?…¿donde
queda la navidad para esos ocho millones de niños, presos en redes de
prostitución o pornografía o en aquellos que son esclavos o están reclutados
para participar en algún conflicto armado?..quien le dice a esos 200 mil niños
que mueren cada año por cáncer y a los 500 mil por causa del SIDA, que este año será su ultima navidad por tener una enfermedad de la cual no son culpables..?
Es fácil sentarse en la mesa la noche
de navidad y disfrutar de la cena mientras se escuchan los fuegos artificiales
y la música navideña…es fácil olvidarse de los 4.000 niños que han muerto ese día
por falta de agua…niños que no solo murieron por deshidratación, sino por falta
de higiene derivada de la escasez de agua corriente o de agua potable o por la malaria
derivada de su escasez, enfermedad que afecta, sobre todo, al África
Subsahariana , donde mueren más de 1,1 millón de personas, cerca del 85,7 % de
la proporción global anual, y de manera particular a los niños menores de cinco
años.…es terrible pensar que cada vez que usamos el WC se van 10 litros de agua por la cañería y que
en Uganda una persona utiliza en total 10 litros por día y que en Etiopia apenas
sobreviven con 3 litros….
Esta navidad pueden disfrutar de un
sabroso pavo o pernil, beber ponche crema o cóctel, celebrar con champaña la
llegada del Salvador…pero cual salvador en realidad celebraremos? Salvador de
quien? Al menos no es de las 14 millones de niñas que viven en campos de
refugiados donde todos los días corren el riesgo de ser violadas, forzadas a la
esclavitud sexual y, como consecuencia de estos actos, corren el riesgo de
contraer el Sida, según informa el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los
Refugiados (ACNUR)….niñas que han quedado sin familia y que aparte de perder
todo han perdido su derecho a la infancia…y es que la navidad no debería ser
para todos los niños?.no debería ser un tiempo de paz
y amor?....debería, pero no lo es,..porque muchos piensan que todas esas cosas
son solo crisis que pueden ser superadas por los gobiernos y entidades
humanitarias mientras la realidad nos dice que ni siquiera pueden ser
acalladas.
Los conflictos profundos siguen estando ahí, antes, durante y después
de la navidad…los años pasan, los gobiernos pasan, se crean nuevas
organizaciones y nada ocurre porque la sociedad ha perdido la conciencia, sin darnos
cuenta nos olvidamos que aquel por el que se celebra la navidad nos dejo un regalo
maravilloso, nos enseño a amar al prójimo y muy en especial amar a los niños… y
tú sigues pensando que se debe seguir celebrando la Navidad en la forma como se
hace?