La luz fue concentrándose sobre sí misma con delicadeza y por un
instante pintó de rojo sangre los rostros, las ruedas de los carromatos y los
bueyes. Luego llegó la noche, y cambió el tacto del aire, y cayó una bruma
baja, uniforme, como un velo azul, sobre el rostro del país, e intensificó,
dándole nitidez, el olor a humo de leña y a reses, y el delicioso aroma de las
tortas de trigo cocinadas al calor de las brasas…(Kim de Kipling)
.....y mientras todo se tiñe de rojo, yo sigo soñando que soy una gitana que no
tiene miedo a nada y que bien vale la pena la vida si los pies se siguen
agitando sobre la hierba ....que cuentan las sonrisas…que ríe con los juegos….y
que no hay lagrimas que nublen por mucho tiempo sus ojos…ella sabe…sabe donde
está el amor....
Brindo por esa gitana!!!!
ResponderEliminarCariños
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ResponderEliminarLa pasión que despierta lo enigmático, la belleza exótica, el embrujo gitano... en conclusión, Tú.
ResponderEliminarY si sabes a ciencia cierta dónde está el amor... enhorabuena... me sentiría feliz.
STEMA.... besicos
¡Qué alegría, cómo sabe mi gata Garabata! La imagino en sus danzas y sus desvelos, en su deambular, en sus noches a la intemperie...
ResponderEliminar¡Precioso!
Besos