Veo esta
foto y puedo sentir que me invade la emoción que sentí aquel día…Desde temprano
habíamos salido de casa con rumbo a San Juan de los Morros para acompañar a
nuestra hija en su graduación. Por fin se acababan todos esos días de angustia
cada vez que salía los viernes por la noche para estar bien temprano a recibir
clases en la más cercana de las universidades donde se podía estudiar radiología…
Al inicio, ella debía coger un bus y
atravesar varios estados, así como hacer una parada para tomar otro carro…ella
siempre ha sido muy arriesgada, sin temor a lo que pudiera sucederle, sin
embargo, cada vez que salía de la casa, mi corazón se quedaba congelado hasta
que regresara el domingo por la noche… y eso se repitió cada fin de semana
hasta que entre varios estudiantes que vivían en la zona decidieron contratar
una persona con una vans para que los llevara y trajera de vuelta, y con eso,
en parte, solo en parte, mis miedos disminuyeron porque la carretera igual
seguía siendo peligrosa..
Pero en fin, que ahí estábamos nosotros a llevar a la Bety a recibir su diploma mientras atrás iba yo con la chachi tomando fotos del camino y mirando el paisaje…Hoy que veo esta foto, se me agolpan los recuerdos de tantas veces que no te hizo falta un momento especial para coger las llaves y decirle a los niños que buscaran algo de ropa porque nos íbamos de viaje…daba igual ir a la playa o a la montaña, te gustaba tanto salir y conocer otros lugares y a mí me gustaba tanto estar contigo…
Debe ser
de tanto mirar esta foto, que anoche soñé que estábamos de paseo y desperté con
una sonrisa y una alegría muy grande, por eso cada noche voy a desear que me vuelvas
a buscar para salir como siempre de viaje…
Acompañar a la hija es un gesto precioso.
ResponderEliminarQue disfrutaras muchísimo. Un abrazo
dios, cuánto me costó el llegar al punto... dios.. no se que decir.
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