Ella
amó profundamente a su esposo Luis...pero muy adentro, sentía remordimientos de
no haberlo cuidado mejor…de no haber estado las 24 horas disponible para
cuidarlo cuando enfermó….de no haber sido la esposa que él hubiese deseado a su
lado...y sobre todo, se sentía culpable de su desconfianza cada vez que él
salía y regresaba tarde por las noches…
Una
mañana de agosto, Luis murió y ahora Muñeca (como él le decía) estaba
recogiendo sus cosas en cajas para donarlas y evitar que se apolillaran…Entre
lagrimas, le costaba vaciar esos cajones bien arreglados de izquierda a derecha
y de abajo arriba. En el primero, Luis guardaba sus corbatas y pañuelos, seguidamente,
sus ropa interior y calcetines y en el ultimo, sus pijamas y franelas
deportivas…Conocía toda su ropa porque ella
se las compraba y los pañuelos llevaban iniciales que ella misma les bordó…todo
estaba en su lugar, bien doblado, excepto uno que estaba rezagado al final del
cajón….Ella lo extrajo con premura y al hacerlo, una cinta rosa, de esas que atan los
cabellos, cayó al suelo...Sintió un temblor extraño en el cuerpo ante la
sensación de que algo estaba por descubrir…abrió el pañuelo por completo y
dentro, escrito en tinta se leía…
”Te amaré por siempre.., J.P.”
Muñeca,
en ese momento, descubrió que las sospechas que siempre pensó eran infundadas, se
hacían ciertas…Toda una vida se sintió culpable de sospechar de su marido y sufría por hacerlo. Incluso había renunciado a su puesto en el banco, donde
figuraba como una gran promesa en la directiva, para dedicarse por completo a él…
Muñeca,
cerró fuerte la caja con toda esa ropa y recuerdos y llamó al conserje para que
le hiciera el favor de bajarlas a recepción. Fue hasta su cuarto y abrió un par
de maletas que llenó con alguna ropa. Acto seguido, se fue a comprar un pasaje a…¿A donde?...a cualquier
parte pensó…donde ya no recuerde nada en Septiembre...ya no sentía remordimientos de nada...ahora le tocaba vivir.
CONVOCATORIA JUEVERA PARA EL JUEVES 24 DE AGOSTO, DE RHODEA BLASON, QUIEN NOS INVITA A QUE EN NUESTRO RELATO HAYA: PAÑUELO, CORBATA O AMBAS COSAS......
Nada queda oculto para siempre...
ResponderEliminarMuy bueno tu relato.
Un beso.
Alguna vez tenía que suceder, que se rebelara, pelear por lo que desea. El pañuelo sirvió como un detonante de esa rebelión.
ResponderEliminarBien contado.
Besos.
Que triste historia! Descubrir haber sido engañada luego de una vida de entrega y devoción debe ser tremendo, la sensación de traición debe pactar todo lo bueno que la relación pueda haber tenido. Muy buen relato. Un abrazo
ResponderEliminarY es que no es bueno vivir la vida con tanta amnegacion....muy bueno, besos.
ResponderEliminarUn detonante que la puso en el[SU] camino correcto.
ResponderEliminarUn abrazo
Un historia de lamentable realidad; de tantos casos que salen a la luz cuando el perjudicado ha puesto su corazón en alguien que resultó ser nada...
ResponderEliminarAhora. él ya había muerto, ¿qué importaban aquellas iniciales? Quizá ahora, que sus supuestas sospechas han quedado resueltas según ella, seguirá su camino. No se puede haber lamentado de vivir.
ResponderEliminarBuen relato.
Besos.
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ResponderEliminarLo que puede cambiar una vida un simple mensaje en un pañuelo... Es hora de construir castillos en otra orilla, sin remordimientos.
ResponderEliminarBesos
!Que sorpresa tan desagradable y dura!
ResponderEliminarNo le queda nada por hacer a tu protagonista, sino que arrancar vuelo hacia donde sea y recomenzar nuevamente. Muy bien planteado.
Saludo
Los milagros de un pañuelo. Triste historia pero muy bien argumentada.
ResponderEliminarDisculpa la tardanza en comentar pero estoy hospitalizada.
Gracias por participar
Saludos