Cuando te fuiste quedé
sola, triste y sin entender como todo lo que tuvimos se volvió nada…hasta esta
pequeña casa de dos cuartos y un baño es un inmenso lugar donde algunas
veces logro ver nuevamente tu cara de bobo mirando fijamente el televisor
mientras me pides que vaya a la esquina por algo para comer y yo, como movida
por tus hilos de titiritero camino hasta la tienda a buscar tus galletas
favoritas…Fue así como sucedió que en una de esas salidas encontré algo dentro de una cajita…
Era un huevo y aunque no lo creas, era como si hubiera estado esperando por mi…Ya en casa lo
coloque cerca de la estufa para darle calor, ese era el único lugar de la
casa que se encontraba medio ordenado, todo seguía igual que el día que nos
mudamos y tuvimos que dormir en un colchón abrigados con las cortinas…¡Como nos
amamos esa noche…! yo arriba de ti, después al revés, en la cocina, en el
sillón, sobre las cajas sin desempacar, y ahora… estoy sola en esta casa vacía mirando un huevo que no se si podrá resistir
la ausencia de su madre…
…y así me quede dormida
como tantas noches cansada de pensar en ti, hasta que un sonido extraño proveniente
de la caja me despertó…corrí a encender la luz y solo
logré decir…
¿ Como ha llegado esto
aquí??
Mi rostro sin muecas
hacía juego con mi cuerpo paralizado…Ahí, en medio de la cajita donde se
encontraba el huevo había un hermoso bebé saliendo del cascarón..un rollizo
pequeñito que me miraba con ojos alegres mientras alargaba sus brazos…
Entonces entendí todo… desde
donde te encontrabas habías cumplido tu promesa.
Este relato así como
muchos otros, se relacionan con el tema propuesto por Charo para este Jueves…mas relatos aquí..
A veces la voluntad de cumplir una promesa logra mover montañas... o hasta hacer un bebé de un huevo! Muy original relato
ResponderEliminar=)
Parece que entre partido y partido televisado, botellín y trozo de pizza, le quedó tiempo para pensar en su promesa.
ResponderEliminarUn beso.
Qué bueno! Me ha parecido un relato lleno de realismo mágico, o de mágico realismo...estaría bueno que lo continuaras a ver hasta dónde da de sí.
ResponderEliminarMuchas gracias por participar.
Un beso
Me gusto ese estilo expresivo, dramático y mágico, Mirella. Al final de esas remembranzas se cumplio la promesa. Muy tierno aporte.
ResponderEliminarBeso
Muy bonito y romántico.
ResponderEliminarMuy bonito y romántico.
ResponderEliminarIncubar un niño, todo puede suceder en el mundo de la imaginación. Me ha encantado. Me recuerda a la película de José Luís Cuerda Amanece que no es poco, donde se siembran hombres.
ResponderEliminarUn abrazo.
Inesperado desenlace. Eso se llama tener imaginación, algo que valoro. Y valoro el que sea verosimil en tu relato.
ResponderEliminarUn abrazo juevero.
Si los bebes salieran así, bueno no se si sería mejor o peor, pero si diferente y menos doloroso y muy original.
ResponderEliminarUn abrazo
Preciso tú relato , y el final es mucho más , gracias por compartir
ResponderEliminarjajaja que linda historia, me ha gustado y sorprendido su final
ResponderEliminarQue final más precioso!! Y yo que me creia leyendo una carta de reproches. Me ha encantado tu historia con ese toque de magia, sencillamente preciosa, besos.
ResponderEliminarMe gusta mucho ese toque de varita mágica, el relato es precioso!
ResponderEliminarAbrazo juevero