La
cita este jueves es en la casa de Juan Carlos para leer mas de reencuentros y
desencuentros…
Había
pasado tanto tiempo, había practicado cada una de las palabras que le diría al
estar a su lado y ahora sus frases salían como una canción varias veces
tarareada…
Anhelé tanto poder estar cerca de
ti, cruzar las miradas en cada sonrisa… hubiera dado lo que fuera por dormir a
tu lado, despertarme y sentirte…sentir tus pies contra mis pies… tú en mi pecho, yo en
tu regazo, ese momento único de ser uno solo, sentir tu calor, tú sintiendo mis
latidos mientras mis manos enamoradas le robaban el trasluz a la noche para dar
cobijo a tu grandeza…
Es que estar junto a ti era igual que ir a la luna y regresar,
verla de cerca y descubrir que no era de queso sino de polvos dorados… era descubrir
que la luna ardía de celos al saberse tan solo un espejismo de tus ojos…de esos embrujadores ojos azules…Porque tú has sido siempre el mago y yo tu secreto…tú
mi añoranza y yo tu bostezo, así sin final, mil vidas, mil secuencias, todo resumido..
yo, tú… tú, yo y lo demás comparsas que alegraban nuestras distantes mañanas
hasta que llegaba el ocaso…
Porque tenían que llegar las
tormentas?…porque fueron más atrayentes los sonidos de las copas en algún bar o
las luces de las farolas que confundieron nuestro cielo con estrellas de neón…?
Esta
vez tampoco hubieron respuestas a sus preguntas… …llevaba varios meses en coma y hoy, su cuerpo inmóvil conectado a una máquina estaba a punto
de ser desconectado…junto a ella estaban sus familiares, sus amigos y…nadie más…Él
nunca llegó a tiempo para despedirse, todo por culpa de una luz roja que no vio
y que lo hizo salirse del camino…
- Hola…estaba
segura que llegarías…dame tu mano…tengo tantas cosas que decirte... Anhelé tanto
poder estar cerca de ti, cruzar las miradas en cada sonrisa…..