Lo
que sucede es un error de anatomía…nuestro cuerpo tiene partes de más que le
añaden peso al cuerpo, como el apéndice y los ojos, que cerramos en momentos de
cansancio, miedo y hasta cuando besamos...o la mitad de la nariz que tiene otro
agujero molesto que solo sirve de estorbo cuando nos resfriamos... o todo este
cabello, que vuelve a crecer y se ensucia más rápido que lo que ganamos el
dinero para volver a cuidarlo…y acaso no sería suficiente con dos huecos en vez
de orejas como dos aletas a cada lado ...? y para que queremos dientes si al
final todos queremos ser vegetarianos?
La
verdad que no lo entiendo…sería más práctico tener solo un brazo para reducir
el espacio en las aceras y de las piernas...bueno, no mencionaré ese mal
chiste, pero de esas, si se necesitan dos, al igual que quitando todo lo demás,
bien podríamos nacer con dos corazones, para tener uno de repuesto…
Apago
su celular para evitar hablar con su familia y se marchó rápidamente a recoger
a su amiga Alba para iniciar el viaje de su sueño gracias al préstamo del
banco...Una sonrisa dibujó su cara al recordar al gerente ofreciéndole el
préstamo por 10 años…
Dobló esa hoja de papel en su bolsillo y trató
de olvidar lo que los doctores le recomendaron y la organización de
envejecimiento exitoso, le escribió en esa carta:
Su corazón ha caducado. Le
comunicamos su próximo fallecimiento. Tendrá lugar el día 30 del mes de
noviembre del 2025 a las 11.55 pm
Y
bien, que eso no era una sorpresa, pero todavía le quedaba una semana y no sería encerrada en una habitación de
hospital donde acabaría su vida.
Si quieren ser sorprendidos con este correo, pueden leer historias superimaginativas en el blog de Marco

La protagonista aprovechará bien esa semana.
ResponderEliminarBesos, Diva.
Bueno, todavía tenía tiempo de disfrutar del viaje de sus sueños, eso sí , el marrón que dejo a la familia fue mucho ajajá, ese préstamo alguien lo tendrá que pagar , las deudas tan bien se heredan . Besote Diva.
ResponderEliminarBuena decisión, de perdidos al río.
ResponderEliminarUn saludo
Muy buena historia, la mejor decisión irse de viaje, encerrada en un hospital esperando a la muerte, no, no tiene sentido, mejor disfrutar hasta último momento y que no se preocupe por estar gorda, más bien que coma y beba lo que le apetezca.
ResponderEliminarUn abrazo.
PATRICIA F.