no
voy a enrollarlo, no voy a fumarlo hasta que
miremos
las estrellas y los cohetes
brillar
en la noche plateada.
Dos
sorbos de whisky en el frasco pero
no
voy a beberlos, te juro que voy a hacer que dure hasta que
estemos
bebiendo del mismo vaso de nuevo.
Y
aunque la arena pueda ser bañada por el mar,
y
lo viejo se perderá en lo nuevo
cuatro
no esperarán por tres,
por
tres nunca esperamos dos,
y
aunque no me esperarás
yo
esperaré por ti.
¡Ay, la espera, la desesperante espera que sólo el amor soporta!
ResponderEliminarBesos