Aún después de todo lo pasado yo seguía pensando que regresarías a mi
vida, que solo a ti te sería fácil alejar a las sombras del dolor…pensé que
quizás el camino correcto era el que podías ofrecerme a tu lado….deseaba que
fueras mi fortaleza, la energía que me
hacía falta, el sentido que siempre busque en esta vida y que a mis tantos
años aún sigo buscando…,pero no fuiste nada de eso y por eso , me alejé sin
sentir incluso que yo era algo para ti…lo se, yo fui la fuerza que dio rumbo diferente
a nuestro destino cuando realmente lo único que yo deseaba en esta vida era ser
tu compañera de viaje.
Y me guardé abrazos, palabras, caricias que te pertenecían, cometí
errores que reconozco, pero que de ninguna manera me hacían merecedora de tus
rencores…. Duele decirlo pero jamás me sentí menos amada por lo que realmente
era, al final creo, sin reprocharte nada, que fui una especie de calmante que aminoró por un tiempo tus dolores
y tristezas y que hoy, ya no quieres ni
verme retratada en un lado del espejo cada mañana…
Nunca entendí tus maneras tan sutiles de hacerme ver tan especial ayudándome
a colocar en su lugar las piezas de un corazón incrédulo y dudoso….¿ Para que ordenarlo si con
cada tiro al blanco ensayabas tu puntería y lo rompías en mil pedazos….?
Llámame ilusa, por no decirme tonta, pero aún después de tantas cosas yo seguía lanzándome al
vacío esperanzada de poder recobrar lo que una vez tuvimos pero tú ya no podías
confiar en mi… Créeme, no hay reproches ahora, porque por un momento de mi
vida supe lo que era sentir el viento en
mis alas...aprendí a tu lado que el mejor regalo que podías dejarme era la libertad de
empezar a ser yo misma aunque tuviera que equivocarme y no ver que algunas mentiras
vienen escondidas tras puños de hierro...
Lamentablemente no tuvimos final feliz, nuestro adiós no lo enmarcamos
con un beso bajo la brillante luz de una luna llena, ni tuvo un te amo
entrecortado, ni siquiera reproches ahogados por el llanto…pero sabes, nos
quedan los buenos recuerdos, para que con el paso de los años podamos regresar
a esa parte de nuestra historia donde las cosas malas se olvidan y entonces podamos
volver a suspirar por lo que se nos fue de las manos y del corazón.
Tú eres un amante de la vida y yo tan solo una aprendiz que sigue
buscando el nombre del viento y ambos descubrimos demasiado tarde ¿ o fue
temprano? que cometimos muchos errores. Ya no es hora de defender mentiras, basta
de sufrir por tonterías…me engañé a mi misma pero sabes que somos guerreros del
tiempo, no me seguiré culpando de nada, ni te culpo a ti por no saberme retener…
pero tampoco dejaremos que nuestros errores se repitan….y como solíamos decir
al final de una noche, al caer esta noche larga te digo ….TQI…
¿Sabes? Has conseguido meterme en el papel y me has hecho sufrir contigo y por ti. El camino del amor es a veces (demasiado frecuente) pedregoso. ¡Ojalá sea pura ficción y mi dolor una provocación de tus letras!
ResponderEliminarSiempre llevaremos sellados en nuestro corazón las alegrías y los sufrimientos; la cuestión es saber llevarlos para que no nos hagan daño toda la vida o no nos engriemos. Sacar lo bueno, lo positivo, los que mejor nos sirva para nuestra vida y procurar ser felices.
ResponderEliminarBesibrazos.