- Vas a morir?

- Todos vamos a morir un día.- le dije con la cara curvada en una sonrisa intentando quitar severidad a sus palabras

- Pero vas a morir pronto?

- Eso quien lo sabe? Quizás ocurra esta noche cuando a la tierra le provoque echarse un estiramiento de esos que se miden en escala, tal vez ocurra mañana al intentar cruzar una avenida, eso hija mía quien puede saberlo?

Y se quedó mirándome, tratando de hacer la pregunta correcta que me impidiera huir por la tangente

- Mamá, dime que no estás muriendo?

Y la abracé y le dije lo único que pensaba podía decirle a alguien que está comenzando a vivir, que todos tenemos que seguir nuestras vidas y cuando el camino se acaba hay que hacerlo sin miedos.

- Como puedes decirme esto y sonreír? Eso no tiene sentido para mi..eres todo lo que tengo

- Recuerda siempre mi amor, que aún en aquellos momentos en que no te sientas con ánimo debes brindar la mejor de tus sonrisas, sin miedos, porque siempre hay alguien esperando por ella y cuando sientas que todo va perdiendo sentido, siempre habrá quien te regale un ¨te quiero¨, porque siempre tendrás un amigo a tu lado, un amor, o esa persona especial con la que podrás pensar siempre en voz alta sin miedo a que juzgue tus palabras y a la que siempre recurrirás y sobre todo jamás olvides que aunque mi voz calle con la muerte mi corazón seguirá amándote

- No es justo que nos dejes…

- No los dejaré nunca, la muerte solo puede extinguir mi parte mortal pero yo siempre seré inmortal aquí adentro de tu corazón, porque ahí estaré sana y salva para siempre esperándolos al final del camino con una sonrisa

(Gracias Mag por este regalo...se siente muy bien escucharlo)