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| El circo de Thibon de Libian |
Todas las niñas tienen sueños y como muchas, de niña quería ser
bailarina de ballet, de flamenco o de circo...(quizás en esto último hubiera encajado mejor para estar cerca de los payasos..) Un día mi papá me llevó como a los 6 años a ver El lago de los cisnes y desde ese día soñaba con dar esas
piruetas por los aires…vestir esos hermosos tutú que Degas utilizó en sus bailarinas...pero con todo y eso, era una niña normal que le gustaban las muñecas, los
lápices de colores y los libros de El Tesoro de la Juventud que mi papá compró
y que cada noche antes de dormir nos llamaba a su cuarto para contarnos algún
cuento….
Fue mi padre quien me inundó la cabeza de sueños de las mil y una
noche, de imágenes de sultanes y princesas, en fin, que fue él quien me
trasmitió esa magia desde su mundo, me heredó su afición por los cuentos, por los números, su
inteligencia (ejem..ejem), su estatura. … de mi madre debo haber heredado el carácter…
Pero como decía, soñaba de pequeña en ser una bailarina hasta que me
di cuenta que para ser bailarina hay que ser "delgaditita" y no tan alta como yo,
así que poco a poco fui desistiendo de los clásicos y de esos maravillosos bailes
sobre hielo que iba a ver cada vez que
llegaba algunos de esos show On Ice …
Con el tiempo y los estudios me fui olvidando de lo que quería ser de
niña hasta que un día rebuscando mis álbumes viejos descubrí el porque de que mi
sueño no se hubiera podido hacer realidad…una tarde cualquiera me disfrazaron
de brujita y esa fue mi sentencia...terminé siendo brujucha para siempre..
Ha pasado casi medio siglo. Quedan pocos tomos de esa enciclopedia del
Tesoro de la Juventud, los muñecos que quedaban los heredé a mi nieta y las pocas fotos de mi niñez...esas casi ni se ven, así como la
niña de entonces hace tiempo que no está….Pero estoy muy segura que la que quedó en su lugar aún
tiene mucho de esa niña dentro y por eso...bailo.
¡Hola Mirella! Me identifico casi por completo con tu tierno escrito. En mi caso, fue mi madre quien me introdujo en esos mundos de fantasía que contienen los clásicos de la literatura infantil. Recuerdo el cuento de unas princesas árabes que tenían corazones de cristal, de modo que su padre les buscaba maridos que fueran muy delicados con ellas...Tenían muchos pretendientes porque la familia real era riquísima, pero al morirse las dos primeras en sus nupcias, la tercera se casó con un hombre pobre que estaba embelesado con ella. El rey dudaba, pero su hija menor vivió una larga y feliz vida! O algo parecido...De modo que ahora eres brujita, pero sigues bailando, al igual que yo (bajo la lluvia). Felicitaciones!
ResponderEliminarSe dicen muchas cosas sobre el complejo de Peter Pan... En primer lugar, yo diría que puede que sí hayan personas con ese complejo y que por motivos de enfermedad mental, no quieran crecer por no aceptar responsabilidades, pero... Qué bonito es sentir ciertas emociones en un cuerpo que pareciera que no le corresponde porque esas arrugas están de sobra y, los achaque nos joden y nos vuelven a la realidad de nuestra verdadera edad.
ResponderEliminarQue viva por siempre esa niña que llevas dentro, esa sensibilidad y ese sentimiento de Peter Pan en tu corazón... Eso te hace más bonita.
Besibrazossssssss
Lo confirmo, Mirella. Dentro de ti habita una hermosa niña grande que vive el mundo mágico que sueña, al margen de lo que le imponga la vida con sus estragos de realidad.
ResponderEliminarAh..Como vc está? Não posso deixar de dizer que seu cantinho é encantador! ♥
ResponderEliminarVenho te fazer um convite, para participar do meu blog!
Aceita? Te sigo de volta!
Deixo pra ti um abraço carinhoso!
Aline Santos, autora do blog 'Epífises de uma Pérola'.
Se dicen muchas cosas sobre el complejo de Peter Pan... En primer lugar, yo diría que puede que sí hayan personas con ese complejo y que por motivos de enfermedad mental, no quieran crecer por no aceptar responsabilidades, pero... Qué bonito es sentir ciertas emociones en un cuerpo que pareciera que no le corresponde porque esas arrugas están de sobra y, los achaque nos joden y nos vuelven a la realidad de nuestra verdadera edad.
ResponderEliminarQue viva por siempre esa niña que llevas dentro, esa sensibilidad y ese sentimiento de Peter Pan en tu corazón... Eso te hace más bonita.
Besibrazossssssss