En medio de la brisa, en esa quietud serena que
a veces se observa en el agua del mar, llegaste hasta mi tan dulcemente como cuando
se ve nacer el sol en el medio del alba….borraste las distancias murmurándome al
oído y mi día se volvió hermoso como el primer
día de primavera cuando se marcha el frío, con toda esa claridad que siempre encuentro
en el interior de tu mirada y en esa sonrisa inesperada de niño ingenuo que
llena mi mundo de magia, de amor, de ternura y pasión…
Me encontraste pensativa y silenciosa con la mente
fija en tu ausencia tan lejana mientras en las alas del callado viento tu
nombre evocaba queriendo desenterrar el misterio de esta absurda realidad… Me
reflejé en tus ojos y tú te reflejaste en los míos, me zambullí en tu mirada y
brillé con todo su brillo hasta que escuche a la brisa inquieta en su revuelto
giro como se quejaba tristísima y hacía eco en mi oído..”Soy yo...soy yo”…y la
noche paró y me desperté con frío , el murmullo acabó y ya no quedaban suspiros…
solo una lágrima de soledad al darme cuenta que era yo misma que suspirando te inventaba…
Y me senté en aquel banco con tu recuerdo en
la mano dejando mi abrigo en el suelo, vagando
mi vista en el tiempo como aguardando que llegaras como siempre, de repente, a
enamorar mi silencio…pero aunque mi paciencia no cesaba, la luna llegaba sin
besos y al ver que no regresabas traté de buscarte entre sueños y me dormí en
aquel banco meditando tu recuerdo sin saber siquiera que todo esto solo había
sido uno mas de mis sueños…
Los sueños alimentan al corazón, pero solo es el Alma quien se alimenta de realidades. Los sentimientos son una realidad ineludible. Vivir un sueño provoca la realidad. El latido del corazón que se acelera es una realidad... La alegría, el desconsuelo... son realidades provocadas por las situaciones que vivimos.... Nos hacen sentirnos vivos y deberíamos, contra toda adversidad, seguir siendo capaces de dar y recibir cariño. Siempre abiertos a la Vida, siempre abiertos al Amor.
ResponderEliminarYa digo por ahí, que somos "Maravillosamente Humanos"
Besicos.
En los sueños idealizamos al ser querido y nos ratificamos en el empeño. Sin sueños se desvanece el amor como el azúcar en el café.
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