Tengo
un cuento entre pecho y espalda a punto de salir…
Hubo
un tiempo en el que aún no nos conocíamos, tú caminabas entonces por los mismos
lugares que yo frecuentaba sin verme… o me veías, pero no me mirabas y yo te
veía y te miraba…era un ir sin venir en ese viento apacible que siempre arreaba
mis velas hacia tu barca para poder encontrar esa mirada que a veces llegaba en
calma y otras con vocación de borrasca…Cien mil veces te inventaba mientras me
perdía como un fantasma dentro de esa mirada azul que te enmarca…esa que me pierde
y me gana las ganas en este cuerpo con alma agitada por la cercanía de un deseo
insatisfecho …
Y
nada me importa si esta noche la luna es portadora de una claridad que triunfa…
me da igual si sigo siendo ese espejo oscuro, sin reflejo, caminando invisible
en la noche con los párpados privados de cobijo, vagando frente al sentir de
tus cavilaciones, de tus escritos, siempre oscurecida para volver a nacer en
otro episodio que cada vez me acerque a lo sublime, porque detrás de cada
esquina de nuestro metabólico tiempo vamos dejando que la vida sea la
desinencia de una caricia haciendo de la gloria un decorado…
Y
cada noche vuelvo a sentir que en algún momento aparecerá lo inesperado, lo
asombroso, y el momento se hará posible….se preñará de promesas y tomará otra
existencia, otro camino….uno igual o nuevo…quien puede decirme?...no importa...
no quiero borrar mi historia contigo, no quiero desnudar el fracaso…prefiero
seguir siendo un desvelo de mañana ..un descuido momentáneo del tiempo que nos
puso en lugares equivocados..… un tropiezo contumaz… un desliz eterno…una
policontusión sideral que me impide pensar, porque pensar es caminar del revés
y yo prefiero soñar y bailar mientras cabeceo sobre esta hoja poseída por un
enjambre de neuronas que implosionan como besos en tu espalda... mientras
duermes.
Sabes darle color a las palabras, que dejen de ser invisibles.
ResponderEliminarBesos.
Me alegro de pasar por tu rincón, hiciste de una palabra invisible toda una bella historia creíble.
ResponderEliminarGracias por tus palabras.
Un beso
Me dejaste sin palabras, qué decir frente a semejante texto! Tiene una historia detrás tratada poeticamente, con expresiones únicas para definir sensaciones que me ha impactado.
ResponderEliminarNo creo que alguien que dice las cosas de esta forma pueda ser invisible para otra mirada, a no ser que el otro esté ciego.
Un beso enorme.
¡Impresionante! ...tus letras de invisibles no tienen nada, van más allá y dejan marca.
ResponderEliminarUn beso.
Diva, mucha fuerza, esperanza y temple en tus palabras...Ese sueño tiene consistencia y alas de eternidad...Sigue danzando y soñando, el corazón y el espíritu lo necesitan para sobrevolar la realidad, amiga.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu buen hacer.
M.Jesús
Un texto muy elaborado del que destaco un párrafo que me ha encantado: 'detrás de cada esquina de nuestro metabólico tiempo vamos dejando que la vida sea la desinencia de una caricia haciendo de la gloria un decorado…"
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
La voluntad mueve montañas, y hay que luchar por hacer lo invisible visible para conseguir nuestros anhelos.
ResponderEliminarPrecioso texto.
Un abrazo
" ...me da igual si sigo siendo ese espejo oscuro, sin reflejo, caminando invisible en la noche con los párpados privados de cobijo"
ResponderEliminarEstas palabras no son invisibles, tienen la fuerza, el color y el sentimiento de una escritora sobresaliente.
Un beso.
Las palabras, si se leen, son invisibles. Si se sienten, no.
ResponderEliminarY tú las dibujas de tal manera que no solo se sienten, sino que se clavan.
Un beso no grande, enorme .-)
Me ha parecido un texto encantador, con palabras que no pueden pasar desapercibidas. Cada una de sus letras están cargadas de mucha fuerza y esperanza.
ResponderEliminarBeso