Mi palabra preferida es sin duda la
que menos suena y la que más ruido hace
a veces… es para mí la madre adoptiva de una imaginación sin pecado concebida, un
aislamiento obligado al que se sumergen artistas, políticos poetas y hasta locos,
para establecer directrices que les permitan desaparecer ideas preconcebidas…y
es que a veces suena tan bonito el silencio que para romperlo, los sonidos que
se emitan deben de ser aún más hermosos!!
No por nada es promovida por muchas
culturas y religiones…Budistas, hinduistas y hasta el Islam, van tras la
búsqueda del silencio interior, como si fuera el Santo Grial…ese El Dorado tan
buscado donde se puede encontrar toda la belleza... y hasta la Santa Iglesia,
la Católica, proclama los votos de silencio como un espacio de expiación y
reflexión que pueda reflejar en nuestra conciencia lo que somos…
Pero más que una receta mágica o ser
el dueño del poder ancestral del silencio, lo que sucede es que cuando estamos
en silencio podemos llegar a escuchar esa voz que nos une con el todo…esa
enmudecida voz que nos abre los ojos y nos muestra como son las cosas y no, lo
que creemos que son…le damos paso a que hable esa otra voz a través de alguien
y si tenemos suerte, hasta llegará en versos o con rington musical, tal vez nos aturda
hablando al corazón sobre el desamor o nos haga entender lo inseguros que somos…quizás
nos recuerde lo mucho que se extrañan esos susurros, o nos muestre los engaños
que sirvieron para camuflar su ausencia….pero, apartando todo eso, pido silencio…no
porque alguien haya muerto, sino como dijo Neruda me pasa que ahora quiero vivirme...
Buenas noches...me voy en silencio..
Buenas noches...me voy en silencio..
Mas palabras favoritas en el blog LAZOS Y RAICES de Dorotea...
De vez en cuando es bueno el silencio para oírse a si mismo. Pero no por costumbre: en el silencio no hay palabras, ni música, incluso ni latidos.
ResponderEliminarSilencio y soledad, son palabras que no me gustan.
Un beso.
Muy buena apuesta para tu selección de una palabra. Por lo que simboliza, por lo que resulta ser si sabemos profundizarlo, el silencio resulta ser la llave para la más prometedora de las puertas: esa que nos comunica con nosotros mismos, y por lo tanto, con la universalidad.
ResponderEliminarUn abrazo
El silencio que cuanto más calla más alto suena.
ResponderEliminarEs así aunque suene extraño.
Un beso enorme.
Mea culpa… Mea culpa… me ha sonado siempre el silencio desde niña. Todo lo que nos rodea tiene silencios sagrados, lástima que muchos tiene dificultades para practicarla, haciendo su prioridad los sonidos caóticos. Muy reflexivo tu texto, Diva. La canción es preciosa!
ResponderEliminarAbrazo
Por culpa de algo llamado tinnitus, zumbidos en el oído idzquierdo, se trata de algo utópico para mí. Nunca hay silencio, y hay veces que lo desearía por algunos minutos. Pero no otras veces, prefiero disfrutar de la música que me gusta, de la voz de una locutora, o que una atractiva mujer me hable.
ResponderEliminarUn canción llamada Silencio es una interesante paradoja. Es que en la música, el silencio cumple una función.
Un abrazo juevero.
Silencio y Soledad, de mis favoritas, donde estamos con nosotros mismos
ResponderEliminarMi beso, Diva
Para mí, el silencio antecede e invita a que broten palabras y confidencias. O bien, rubrica y concluye lo que nos acabamos de decir. Es una de las respuestas más contundentes, cuando el público escucha un concierto y al final nadie se atreve a romper el recuerdo sonoro y el aplauso se hace esperar. Muy interesante, tu aportación. Un abrazo.
ResponderEliminarLlevas razón, no valoramos el silencio y el silencio tanbién es palabra.
ResponderEliminarLlevas razón, no valoramos el silencio y el silencio tanbién es palabra.
ResponderEliminarNada hay más opuesto al silencio que el mundo actual, porque éste, en realidad, es el de la cultura del ruido. Así, es difícil encontrar un lugar libre de bullicio incesante, a menos que sea un desierto, donde una persona puede lograr escucharse a sí misma porque allí, paradojicamente, hasta el susurro del viento forma parte del silencio.
ResponderEliminar