LETRAS DESAFINADAS

Cada noche si tú no estás a mi lado, la luna por mas que se empeñe solo puede asemejarse a una pelota pinchada mientras el viento en mi oído susurra ese silbido tan parecido a un lamento desafinado, y yo para huir de ellos apuro mis pasos hacia ese lugar en donde los sueños son lo verdadero…

Yo se que siempre deserté de ser parte de alguna escala musical, de formar parte de esa clase de personas que les gusta ser mimadas, de dejarme querer, pero esta noche añoro tu presencia, evoco el ritmo que tejes a mi alrededor, para soñar contigo esta noche y encender luceros en el cielo…cada paso tuyo, cada gesto, todo se hace amable, todo es un son, una danza que esconde el tesoro de tu tierno encanto…estar contigo supone tener la inigualable sensación de haber empezado el libro de la vida pero al revés, tu aliento es la última página de un lector ávido de sorpresas, al que ni la oscuridad de su corazón puede arrebatarle esa única noche de clamor, esa recompensa…

Saberte, tener la seguridad que estas ahí para mí, es escupir con palabras el egoísmo de este amor que se llena torpemente de dudas…abrigarme con tus besos, es despertar cada mañana envuelta en una nueva sonrisa, comprender que tú, que tú preparas esa medicina que me llena de placer y ahuyenta mi dolor…

Mío…por siempre solo mío…son tantos recuerdos, tantas tardes, que hoy quisiera decirte que para mí, que no creo en nada, escuchar tu nombre, leer tus letras, es creer en Dios