...no me sueltes...

Tú sigue diciendo que tu corazón sigue sintiendo

que soy parte importante de tu vida,

yo mientras seguiré soñando que la mía

 lleva un apéndice latiendo irregular

 adherido en algún lugar de tu costado

y que descuelga imperceptible en ese lado

con una cuerda que le impida la caída,

como el oculto  resultado imperfecto

de un defectuoso amor de experimento

que prefiere negar sobre negado

para no ver el lamentable estado

de este corazón que se hizo el mudo y ciego …

quizás tonto pero no menos bueno

como la paja que se ve en el ojo ajeno

y prefiere no mirarse para no hacerse daño

Tú sigue escribiendo que para ti aún existo

yo seguiré  disfrutando de este irreal y real contacto

de sentir tus labios sobre estos labios

que desean calmar el hambre y la sed que me provocas

 aunque la realidad no sea otra cosa

que el indetenible roce de estos dedos sobre mi boca

que prefiere ser efímera, obediente y silenciosa

como esa gota desprolija y solitaria de sudor

 que  por tu cuerpo lentamente

y sin frenos se resbala

mientras disfruta del camino recorrido en la caída

antes de ser la sultana que a tus pies se inclina

y salpique nuevamente con chispitas de amor  tu alma

porque nada se termina,

 porque todo empieza cuando se piensa que se acaba...